, 16 Ago. 22 (ACI Prensa).- El Arzobispo de Bogotá (Colombia), Mons. Luis José Rueda Aparicio, se solidarizó con la Iglesia que está siendo perseguida por la dictadura en Nicaragua y llamó a los fieles a no desanimarse por estas situaciones, pues en medio de las persecuciones está el consuelo de María, “que nos llena de esperanza” al haber sido llevada en cuerpo y alma al Cielo.
Durante la Misa celebrada ayer por la Solemnidad de la Asunción de María, el Prelado se refirió a la situación que afronta la Iglesia Católica en Nicaragua en las últimas semanas, con sacerdotes acosados y el Obispo de Matagalpa, Mons. Rolado Álvarez, asediado desde el 4 de agosto en su sede episcopal.
“El P. Jorge, párroco de la catedral, nos leyó el mensaje de solidaridad con la Iglesia perseguida en Nicaragua, y hay persecución en distintas partes del mundo a aquellos que anuncian el Evangelio, pero en medio de la persecución hay consuelo”, expresó Mons. Rueda Aparicio.
El Arzobispo de Bogotá dijo a los fieles que ante estos atropellos “no podemos nosotros desanimarnos, no podemos perder las fuerzas y la alegría misionera. Debemos continuar en medio de las persecuciones sociales, culturales”.
El Prelado aseguró que en medio de las persecuciones externas e internas, “que tenemos en ese combate interno de cada uno de nosotros, hay un consuelo: mirar a María que nos llena de esperanza y de consuelo cuando es asunta al Cielo”.
En ese sentido, Mons. Luis José Rueda recordó que el libro del Apocalipsis menciona la persecución del dragón rojo que quiere devorarse al niño que está en el vientre la mujer “vestida de sol, con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas”.
“La mujer está en cinta y el dragón está al acecho. Eso sucede en su familia y en la vida de todos nosotros. Está el signo de la vida, representado en María, mujer encinta, pero siempre habrá un signo del mal al acecho buscando destruir la obra de Dios, buscando destruir la dignidad de hijo de Dios en cada uno de nosotros, en nuestras comunidades y en la sociedad”, señaló el Arzobispo.
“Hay persecución, pero hay consuelo. La mujer fue llevada al desierto para ser protegida y el niño que nació fue llevado a la presencia de Dios”, indicó.
Tras recordar que María “es el primer ser humano que ha sido asumido a la gloria celestial”, Mons. Rueda dijo que la asunción de la Virgen “nos hace pensar que en medio de nuestra pequeñez humana, hay una semilla del Reino de Dios que nos invita a la santidad, a la fraternidad que nos hace sentir Pueblo de Dios”.
Solidaridad con Nicaragua
Este lunes 15 de agosto, Mons. Rueda Aparicio también dirigió un mensaje a la Iglesia Católica en Nicaragua para expresar la solidaridad y cercanía de los obispos colombianos.
✅Los obispos católicos de Colombia, en unión con todos los fieles del pueblo de Dios de nuestra nación, saludamos a la hermana Iglesia que peregrina en Nicaragua, deseándoles la paz de parte de Dios, nuestro
Padre🙏🏻 pic.twitter.com/fa5rLMUq6Z
— Arquidiócesis de Bogotá (@arquidiocesisbo) August 15, 2022
El Prelado señaló que “estamos muy preocupados” y “nos duele mucho lo que sucede ahí con la Iglesia. Nos duele ese hostigamiento, nos duelen esos signos de persecución y de violación de los derechos humanos que impiden la expresión de la fe en Jesucristo el Señor”.
Cristo, afirmó, “es el Rey de la Paz, Él nos invita a la reconciliación, y por eso estamos expresando desde Colombia nuestra unidad con todos los fieles laicos y con los hermanos obispos de Nicaragua”.